Cómo configurar tu web bajo HTTPS
¿Al entrar en tu página web desde Chrome te aparece un mensaje indicando que no es segura? ¡Entonces debes configurar tu web bajo HTTPS tan pronto como puedas!
Y es que desde hace casi dos meses, Google empezó a almacenar los datos de las páginas que están bajo HTTPS para incluir en la navegación un mensaje especificando que son seguras, mientras que con el resto el mensaje que se muestra es el contrario “no es seguro”.
Configurar tu web bajo HTTPS es esencial para garantizar la privacidad de los datos de tus usuarios.
Si tienes una tienda online, ya puedes imaginarte la mala imagen que esto te ocasionará, ¿o acaso alguien quiere comprar en una tienda que está marcada como no segura por uno de los navegadores más importantes? Por eso es fundamental que implementes el HTTPS en tu web si no quieres ver cómo tu número de visitas y de conversiones baja en picado. ¿Cómo hacerlo? Te lo explicamos en 4 pasos:
Comprobar que tu servidor acepta peticiones HTTPS
Trata de acceder a tu página web usando HTTPS, si puedes hacerlo, aunque te aparezca el anuncio de “no es seguro”, tu servidor sí que acepta estas peticiones. En caso contrario, deberás ponerte en contacto con quien te lo administre para que te lo configure adecuadamente.
Instala un certificado válido para realizar las transferencias bajo HTTPS
Si has podido acceder a tu site pero te ha aparecido el ya habitual mensaje, esto se debe a que no estás empleando un certificado HTTPS que resulte válido.
En el mercado encontrarás muchos certificados y de diferentes tipos, en función de la clase de modelo de negocio que tengas, necesitarás uno más o menos amplio. Por ejemplo, si tienes una e-commerce en la que evidentemente se manejan datos bancarios, lo conveniente es que compres un certificado completo que garantice la seguridad de tus usuarios, mientras que si tu página web es simplemente corporativa, te bastará con un certificado básico para proteger los datos de tus usuarios cuando se descarguen uno de tus contenidos.
Para instalar el certificado, volverás a necesitar la ayuda de profesionales. Es fundamental que esta labor la realice un experto en la materia porque de lo contrario podría ocasionarte graves daños a tu página web.
Configurar las redirecciones necesarias
¡Ojo a este paso porque es INDISPENSABLE! Una vez que ya tengas tu página web bajo el sistema HTTPS, debes llevar a cabo todas las redirecciones que sean necesarias. ¿Por qué? Porque Google entiende que la versión antigua y la de HTTPS son completamente diferentes, por lo que podría interpretar que tienes contenidos duplicados y errores de redireccionamiento que pueden afectar gravemente a tu SEO.
Pero no te preocupes, realizar este cambio es más sencillo de lo que crees. Si tu site es WordPress, primero que nada debes cambiar la URL para que emplee HTTPS. ¿Cómo? Dirigiéndote hacia el administrador, haciendo clic en ajustes generales e insertando HTTPS en las URL de los campos de dirección del sitio y WordPress.
Después, ya podrás centrarte en realizar los direccionamientos. Comprueba minuciosamente el resultado para que no haya errores que puedan causarte problemas.
Verifica que todo está correcto
En este punto tu página web debe estar operando correctamente, pero hemos de comprobarlo para evitar sorpresas desagradables.
- Verifica que cuando entras a tu página web a través de http eres redirigido automáticamente a la versión HTTPS.
- Comprueba que aparece el candado y el mensaje de “es seguro” en verde al lado de la dirección de tu web.
- Examina cada rincón de tu web para asegurarte de que no haya errores de direccionamiento.
De esta simple pero efectiva manera, habrás logrado que tu web se acoja al sistema HTTPS y que figure como segura, evitando sufrir una caída en el número de conversiones y/o visitas a tu site.
